La cobra sentada
- Siéntense en una silla y pongan los dos pies planos en el piso, con la espalda contra la silla y una mano en cada rodilla.
- Giren y estiren la parte superior del cuerpo como una cobra, levantando la cabeza, mirando hacia el techo e inhalando por la nariz.
- Exhalen haciendo un sonido de siseo, soplando entre los dientes mientras se relajan.
- Recuéstense en la silla y bajen la cabeza lentamente para mirar hacia el piso.
- Repitan tres veces.